La curación no tiene por qué ser dramática: cómo el Ayurveda crea un cambio duradero

Como practicante de la medicina india y maya, supongo que debo decir que me dedico a la sanación. Me ha llevado mucho tiempo acostumbrarme a usar la palabra "sanación" en relación con mi trabajo. Para mí, la sanación implica una especie de magia, una obra de magia inmediata que debo realizar. Lo que he descubierto es que la forma más poderosa de sanación natural es el cambio lento y constante, realizado día a día, y puedo apoyarlo, aunque a veces sea difícil convencerlo.

Somos adictos al drama

Además de dirigir un negocio online, también soy terapeuta de panchakarma aquí en Vermont. El panchakarma es una técnica tradicional de limpieza profunda utilizada en Ayurveda (medicina india). Esta práctica es breve, sencilla y profunda, e incluye ayuno, masajes, enemas, purgas e incluso vómitos terapéuticos. Estas prácticas de limpieza profunda son bastante drásticas, y aunque generan un cambio repentino en la situación de nuestros clientes, no son adecuadas para todos ni realmente sostenibles. Es decir, si ayunas, tomas enemas medicinales y haces purgas con aceite de ricino, obtendrás resultados espectaculares. Y, por supuesto, esto te hará sentir poderoso. Pero si regresas a casa e inmediatamente retomas tu vida y hábitos anteriores, ¿es un cambio duradero? ¿Es una sanación permanente?

Lento pero constante siempre gana

En mi trabajo personal como practicante ayurvédica, la realidad es que soy educadora. Imparto cursos en línea sobre Ayurveda para la curación de molestias digestivas persistentes y problemas de fertilidad en mujeres. Mis cursos duran aproximadamente diez semanas, y cuando trabajo individualmente con mis clientes, la duración es de al menos tres meses. La clave de la curación con Ayurveda reside en la medicina preventiva y las prácticas de autocuidado. Aprender estas prácticas y su contexto (tan importante), así como incorporarlas a la vida, no es una solución fácil. Por eso trabajo con personas durante más tiempo que la mayoría de los practicantes. Me gusta decir que me dedico a la magia práctica; en este caso, es un cambio lento y constante, a lo largo del tiempo, lo que equivale a la curación.

Ir despacio y con constancia puede ser difícil cuando uno no se siente bien, pero este es el tipo de sanación que dura toda la vida. No se trata solo de una solución mágica y rápida, ya sea natural (panchakarma) o convencional (cirugía, etc.). Este tipo de trabajo es para personas dispuestas a participar activamente en su proceso de sanación: a asumir la responsabilidad de las decisiones que toman a diario, a cambiar malos hábitos (como no dormir lo suficiente, comer comida chatarra o sobrecargar el hígado con hormonas o medicamentos sintéticos) y a adoptar otros mejores.

Olvidando el dolor

La curación de mis alumnos no suele ser ostentosa ni dramática. Nos sorprende y actúa entre bastidores, sin que nos demos cuenta. Cuando acepto a un cliente nuevo por primera vez, sus problemas digestivos pueden ser tan simples como estreñimiento crónico o gases cada tarde. Quizás no pongan en peligro su vida, pero interfieren con sus actividades cotidianas.

A menudo, después de una o dos sesiones, esos problemas se solucionan con cambios de dieta y estilo de vida personalizados. El cuerpo es increíblemente resiliente. En nuestra siguiente reunión, cuando les pregunto sobre su digestión, es como si casi hubieran olvidado que tenían ese problema. Olvidaron el dolor y las molestias diarias que sentían. Una vez que empiezan a sentirse mejor, es como si "olvidaran" lo mal que se sentían antes.

Y tomo este olvido como un cumplido. En cierto modo, puede ser un mecanismo de protección subconsciente; tal vez la mente y el cuerpo digan: «Bueno, no malgastemos más energía en esto, ya está arreglado». Y veo que han experimentado una sanación profunda, aunque el momento de sanación fue tan sutil que simplemente no se dieron cuenta.

Sin alboroto, sin drama, pero no por ello menos poderoso.

En mi trabajo, he adquirido mayor respeto por lo sutil. Incluso con nuestros clientes de panchakarma, noto que son los cambios sutiles que observo a lo largo de su proceso —emociones, relación consigo mismos y forma de ser e interactuar con el mundo— los que realmente parecen ser los más relevantes en su día a día.

Quizás es por esto que la medicina natural está ganando fuerza recientemente: estamos listos para tomar el control de nuestro bienestar y estamos listos para lo real.