por The Ayurveda Experience febrero 23, 2016
Existen diversos trastornos o síntomas que pueden ocurrir debido a la supresión de nuestros impulsos naturales:
1) La supresión del impulso de eructar puede causar trastornos relacionados con el subtipo de Vata llamado Udana o la forma de movimiento superior de Vata. Por lo tanto, es previsible que cause hipo (que puede ser muy molesto), tos, pérdida de apetito (ya que Vata también controla el hambre), temblores y pesadez en la región del corazón y el pecho. Como podemos ver, estos son trastornos predominantemente Vata, pero pueden precipitar graves enfermedades relacionadas con los pulmones y el corazón si estos órganos ya están debilitados. Por lo tanto, debe evitarse la supresión de este impulso.
2) La supresión del impulso de bostezar causa agravamiento de Vata ya que el bostezo también es una función del subtipo de vata llamado 'udan' o vata superior. por lo que su supresión causa espasmos, convulsiones y atrofia de partes del cuerpo, temblores y pérdida de sensibilidad. Estos parecen increíbles, pero si observamos las teorías recientes detrás de la fisiología del bostezo, llegamos a saber que están relacionados con la función óptima del cerebro. Según una teoría reciente, bostezamos cuando nuestro cerebro se calienta. Bostezar lo enfría. Entonces, si relacionamos el bostezo con un mecanismo de defensa del cuerpo para salvar al cerebro de daños (aunque la teoría aún se está investigando), podemos imaginar el daño que puede ocurrir si suprimimos el impulso de bostezar deliberadamente solo para decirles a todos que no estamos aburridos, cansados ni somnolientos.
3) La supresión del deseo de comer causa síntomas predecibles como emaciación, debilidad, pérdida de brillo facial, dolores corporales y mareos. Sin embargo, también se menciona un síntoma de pérdida de apetito que parece contradictorio. Sin embargo, aparece en la privación a corto plazo cuando una persona no come a la hora estipulada. Pasado ese tiempo, el apetito disminuye y la persona no tiene ganas de comer o no disfruta mucho de la comida. Los doshas Vata y Pitta se agravan si se suprime el deseo de comer.
4) La supresión del deseo de saciar la sed provoca síntomas relacionados con la deshidratación, como sequedad en la boca y la garganta, pérdida de audición, cansancio, pérdida de la función cerebral, enfermedades cardíacas como shock cardiovascular o la posibilidad de un infarto por el espesamiento de la sangre. En la práctica, estos síntomas se presentan durante la deshidratación aguda, debido a la incapacidad de obtener o retener agua (debido a vómitos o diarrea); de lo contrario, nuestro centro de la sed se encarga de que tengamos sed según las necesidades del cuerpo. Sin embargo, también se observa que, debido al hábito de beber menos agua o a la incapacidad de reponer los líquidos perdidos durante el ejercicio, se presentan niveles subclínicos de deshidratación. Necesitamos beber entre 1,2 y 2 litros de líquido al día, e incluso más en climas cálidos o si realizamos ejercicio intenso. Si no ingerimos suficientes líquidos durante el día, corremos el riesgo de sufrir accidentes cerebrovasculares y ataques cardíacos, y las investigaciones lo demuestran. Por lo tanto, fue muy inteligente por parte de los antiguos defensores del Ayurveda mencionar la pérdida de la función cerebral y las enfermedades cardíacas como posible consecuencia de la ingesta insuficiente de líquidos. La supresión del deseo de saciar la sed resulta en el agravamiento de Vata inicialmente y de Pitta posteriormente. Siendo el oído uno de los sitios importantes de Vata, la pérdida auditiva es uno de los síntomas que se presentan tempranamente.
5) Reprimir las ganas de llorar (retener las lágrimas) puede causar rinitis, enfermedades oculares, enfermedades cardíacas, pérdida de apetito y mareos. Las lágrimas son nuestra respuesta natural a trastornos emocionales como la tristeza o la felicidad extremas. Retener las lágrimas deliberadamente nos impide liberar la oleada emocional, lo que resulta en una acumulación en el subconsciente. El corazón o "Hridya" se usa a menudo como sinónimo de mente. Por lo tanto, los textos implican que contener las ganas de llorar puede causar problemas psicológicos y, por lo tanto, si alguien no expresa sus sentimientos, puede desarrollar enfermedades psicosomáticas. Reprimir las lágrimas puede agravar Vata y Pitta.
6) La supresión del deseo de dormir causa síntomas como bostezos repetidos, dolores corporales, pérdida de atención, pesadez mental (y trastornos mentales) y pesadez ocular. Esto resulta en el agravamiento de los doshas Vata y Kapha. El Ayurveda considera que dormir bien es uno de los pilares de la salud, junto con la alimentación y un comportamiento disciplinado en todas las esferas de la vida, en particular en la sexualidad. La falta de sueño prolongada es una causa importante del agravamiento de Vata y puede provocar trastornos como la artritis. Una vez que se produce la privación de sueño y el Vata se agrava, el cuerpo, como defensa, produce más Kapha, lo que provoca el agravamiento de Kapha. Por lo tanto, observamos síntomas debidos al agravamiento de Vata y Kapha a corto plazo. Sin embargo, con la privación de sueño regular durante un período prolongado, el agravamiento de Vata prevalece.
7) La supresión de la necesidad de respirar rápidamente como resultado del trabajo físico causa sensación de un nudo en la garganta, el pecho o el abdomen superior, problemas con la circulación, por ejemplo, un shock vasovagal, y pérdida de la conciencia o más precisamente un síncope (cuando el cerebro no recibe sangre adecuadamente oxigenada). En realidad, nuestra frecuencia respiratoria es aproximadamente 1/4 de nuestra frecuencia cardíaca. Por lo tanto, si la frecuencia cardíaca aumenta debido al trabajo físico, también debería aumentar la frecuencia respiratoria (y de hecho lo hace). Pero aferrarse a ella debido a cualquier razón puede causar el agravamiento de Vata, particularmente el Vata superior llamado Udan Vata. Esto puede correlacionarse con la actividad del nervio vago y la mayoría de los síntomas se deben a la estimulación del nervio vago. Si esto se practica durante períodos prolongados, también puede conducir al desarrollo de enfermedades cardíacas, que podrían ser trastornos del ritmo, hipertrofia de las cámaras, etc.
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