Enfoque ayurvédico del cáncer

Enfoque ayurvédico del cáncer: el Ayurveda nombra enfermedades con infinitas posibilidades de terminología, pero la palabra cáncer no existe.

De hecho, el Ayurveda ve el mundo y el cuerpo humano en términos de elementos o fuerzas que lo constituyen y crean problemas cuando están en desequilibrio.

Aquí hay algunos puntos clave para comprender la visión ayurvédica sobre el cáncer y cómo restablecer el equilibrio.

Diferencias con el enfoque alopático

¿Global o localizado?

En Ayurveda, el cáncer se aborda de forma global. Considerando que, incluso si se localiza en una parte específica del cuerpo, es el conjunto lo que debe tratarse. El cuerpo es una entidad global cuyas partes no pueden considerarse individualmente. Todo en el cuerpo funciona en armonía e interdependencia, donde ni siquiera una sola célula puede funcionar por sí sola sin comunicarse. Por lo tanto, si una parte se ve afectada, afectará a toda la cadena, incluida la mente.

¿Reforzar o debilitar?

La quimioterapia, la radioterapia y otros tratamientos oncológicos comunes propuestos buscan debilitar todo el cuerpo para debilitar el cáncer y prevenir su propagación. De hecho, las células cancerosas se destruyen, pero también las sanas, y no hay garantía de que no reaparezca.

En Ayurveda, el objetivo es reforzar todo lo afectado para recuperar las funciones normales.

Obviamente, la inmunidad es un punto clave, además de armonizar los doshas y aportar claridad mental. Esta es la cuestión crucial y controvertida actual respecto a los tratamientos contra el cáncer en la medicina moderna, ya que la quimioterapia debilita el cuerpo para eliminar la enfermedad, y muchas personas mueren no de cáncer, sino de quimioterapia. Este enfoque se opone al Ayurveda, cuyo objetivo es fortalecer el cuerpo para que comprenda cómo autocurarse y reconozca el origen de los desequilibrios.

¿El paciente o el cuerpo?

En Ayurveda, el tratamiento se centra en el paciente (mente, cuerpo y alma) y no solo en el cuerpo. El bienestar de la persona es fundamental. Su estado mental es clave, y la comprensión de la enfermedad y sus manifestaciones es crucial. Se trata a la persona, a todo su ser, no solo a la enfermedad.

¿La causa o los síntomas?

La medicina ayurvédica tiene en cuenta el cuerpo, la mente y el espíritu y cree que el cáncer encuentra sus raíces y orígenes en el espíritu o el alma, para luego terminar manifestándose en el cuerpo, creando desequilibrio de los doshas.

Además, otras posibles causas en Ayurveda pueden estar a cargo conjunta o individualmente: supresión emocional, malos hábitos, estilo de vida o dieta inadecuada, Karma (o consecuencias de acciones pasadas o recientes), genética y predisposición hereditaria, etc.

Si solo tratamos los síntomas, vivimos siempre con miedo, rezando para que el cáncer no se manifieste de nuevo, pero seguimos siendo su presa. Si entendemos por qué ocurrió y estamos dispuestos a trabajar en ello, no hay posibilidad de que la enfermedad se manifieste de nuevo. En esencia, la función de cualquier enfermedad es decirnos algo, despertar nuestra conciencia o brindarnos un experimento para que podamos crecer.

Los efectos secundarios

Los diferentes tratamientos que ofrece la medicina ayurvédica pueden utilizarse no sólo como cura principal, sino también como terapias complementarias.

El yoga, la meditación, el pranayama (prácticas de respiración), los suplementos a base de hierbas, etc. pueden ayudar a un paciente que se somete a un tratamiento alopático para el cáncer que siempre conlleva efectos secundarios difíciles que pueden resultar especialmente incapacitantes.

Los tratamientos profundos como el Panchakarma también pueden ser el enfoque principal para curar el cáncer.

El diagnóstico

Campañas de prevención

Las campañas actuales contra el cáncer promueven el diagnóstico precoz, el seguimiento regular y los análisis: mamografía, colonoscopia, análisis de sangre, etc. y es probable que si tienes 60 años o más recibas estas recomendaciones.

En teoría, el objetivo de estas campañas es positivo: intentar detectar los problemas en sus etapas iniciales. Sin embargo, el problema es que infunden miedo y aún no se ha demostrado que reduzcan las probabilidades de desarrollar cáncer. Además, las herramientas de diagnóstico suelen ser invasivas y no son lo suficientemente avanzadas ni precisas como para detectar eficazmente todos los tipos de cáncer.

Métodos de diagnóstico

Generalmente, el cáncer se diagnostica tras la manifestación de los síntomas, que en Ayurveda ya representan una etapa avanzada de la enfermedad y su rápida progresión. En este punto, es más difícil tratarlo y superarlo. Por lo tanto, la prevención por todos los medios posibles y una rutina personalizada son de suma importancia.

Los médicos ayurvédicos pueden diagnosticar la enfermedad en sus etapas iniciales, antes de que provoque desequilibrios más graves en el cuerpo y la mente. El Ayurveda clasifica la evolución de las enfermedades en seis etapas (Samprapti).

Los diagnósticos y equipos modernos sólo pueden detectar la enfermedad cuando ésta se encuentra en la quinta o sexta etapa.

La importancia del estilo de vida y la espiritualidad

La comida

Desde el punto de vista ayurvédico, la mayoría de las enfermedades, cuando se imprimen en el cuerpo, comienzan con la digestión.

Por lo tanto, la alimentación debe adaptarse a la constitución de la persona (Prakriti), su estado de salud (Vikriti) y muchos otros factores. El uso de especias saludables, alimentos frescos, cocinados y de fácil digestión es importante para evitar la formación de toxinas o Ama. Se deben evitar los productos refinados, industriales, fritos, azucarados y salados.

Durante el tratamiento contra el cáncer, los hospitales en su mayoría dan alimentos industriales, recalentados o envasados ​​que no son acordes a la constitución de la persona, su estado de salud actual o su capacidad digestiva y muchas veces combinaciones inadecuadas de alimentos, cuando la dieta debería ser una de las primeras consideraciones en el tratamiento.

El estilo de vida y los hábitos

La inmunidad y el metabolismo se pueden regular con cambios simples como: dormir temprano y levantarse temprano, tomar tiempo para descansar y meditar, fomentar emociones y pensamientos positivos, evitar el tabaco y el alcohol, así como el té y el café, y evitar demasiada carne.

Otros factores a evitar pueden incluir: suplementos hormonales, campos electromagnéticos, pesticidas, demasiada exposición al sol, etc.

Un practicante ayurvédico puede implementar muchas estrategias y programas personalizados para promover el bienestar del cuerpo, la mente y los sentidos.

Práctica espiritual

La depresión, el estrés y la ansiedad son problemas comunes que afectan a muchos de nosotros.

A menudo, estos problemas pueden explicar reacciones corporales inexplicables. Lo contrario también es cierto: un cuerpo enfermo puede provocar trastornos mentales. La mente y el cuerpo están interconectados y ambos funcionan óptimamente solo en una colaboración cohesiva. De lo contrario, la patología comienza a crecer y, con el tiempo, puede afectar a todo el ser.

El cáncer, la enfermedad de este siglo, está ligada en gran medida a una mala higiene de vida y a la falta de tiempo para afrontar y gestionar nuestras emociones.

Si no se corrige el factor mental en cada enfermedad, es probable que reaparezca. Nada puede perdurar ni permanecer en el cuerpo a menos que la mente lo permita. La medicina moderna confunde la espiritualidad con la religión o la medicina alternativa, a pesar de ser un punto central. El origen de toda enfermedad no es material: las manifestaciones físicas son solo el efecto secundario de un problema más profundo. Es importante examinar nuestra personalidad, todas nuestras tendencias negativas, adquiridas o heredadas. Es importante reconectar con nuestro ser interior divino e infinito para sanar.

El cáncer se considera una de las enfermedades más mortales de su tiempo, que ha cobrado muchísimas vidas y sigue contando.

Científicos de todo el mundo están trabajando para encontrar soluciones increíbles sin alterar la armonía del cuerpo y la mente del paciente, pero aún no lo han logrado.

Entonces surge la pregunta: ¿Por qué no lo han descubierto todavía?

La respuesta es bastante sencilla, pero la mentalidad sesgada de la ciencia moderna no toma a la Mente como una entidad causante de esta enfermedad mortal, ni la considera de importancia alguna en el tratamiento.

La espiritualidad es una forma de comprender las necesidades de la Mente ya sea para satisfacer sus necesidades o para entender por qué esas necesidades no pueden satisfacerse.

La coordinación mente-cuerpo es muy importante para vivir una vida saludable y libre de enfermedades.

Ayurveda es una medicina mente-cuerpo que potencia la armonía entre el cuerpo y la mente del paciente desde hace siglos.

El papel del karma

El Ayurveda clasifica las enfermedades según la causa.

Son de tres tipos:

1. Karmaja Vyadhi – Incluye enfermedades que se originan debido a acciones pasadas.
2. Doshaja Vyadhi – Enfermedades que surgen de causas específicas que conducen al desequilibrio del dosha y luego a la manifestación de la enfermedad.
3. Doshakarmaja Vyadhi – Combinación de acciones pasadas e indulgencia en las causas de la enfermedad.

El cáncer puede considerarse bajo Karmaja y Doshakarmaja Vyadhi.

Incluso se afirma que sus raíces posiblemente sobrepasen los límites de la Vida y la Muerte hasta que se resuelva.

Creemos firmemente que el karma siempre influye en la manifestación del cáncer. Este es un tema controvertido para nuestra comprensión científica moderna, pero los antiguos principios ayurvédicos siguen siendo verificados por los descubrimientos científicos.

El cáncer, en palabras sencillas de un humilde médico ayurvédico, es “una enfermedad en la que una nueva vida comienza a crecer dentro de nosotros cuando suprimimos la vida que hay dentro de nosotros”.

¿Cómo suprimimos la vida dentro de nosotros?

• Cuando surgen conflictos entre lo que queremos y lo que tenemos en nuestra vida.
• Por falta de contentamiento.
• Con expectativas crecientes de nosotros mismos y de los demás.
• Mediante la expresión inadecuada de nuestros sentimientos, suprimiendo la emoción verdadera o sobreexpresando la emoción negativa (vergüenza, culpa, ira, frustración, celos, etc.)
• Con falta de espiritualidad y desconexión con lo divino.
• De la opresión social, cultural o familiar.

El Ayurveda espiritual puede ayudar a lograr el equilibrio mejorando la armonización del cuerpo, la mente y el espíritu.

No se puede negar que la manifestación del cáncer se encuentra en el plano somático, pero su creación se encuentra en los planos psíquicos.

La ciencia ha avanzado con el tiempo, pero todavía no existe tecnología que pueda explorar los enigmas no resueltos de la Mente y el Karma.

Sin reordenar el equilibrio de la mente no es posible deshacerse del cáncer, de ahí su alta tasa de recurrencia.

Es necesaria la calibración cuerpo-mente para eliminar el cáncer de forma permanente.

La espiritualidad es la cura profunda

En Ayurveda no tratamos ninguna enfermedad; simplemente fortalecemos la mente y el cuerpo lo suficiente para curarse a sí mismos.

La espiritualidad es una herramienta muy eficaz para contrarrestar el karma. El Ayurveda es una medicina mente-cuerpo de eficacia comprobada para las anomalías del cuerpo y la mente. Sin duda, cada persona necesita remedios específicos para anular su karma y sus problemas mente-cuerpo, y el Ayurveda espiritual es la solución óptima.

El Ayurveda espiritual es un estilo de vida específico que enfatiza cada aspecto de nuestra vida y las mejores prácticas posibles.

Conclusión

Detrás de cada miedo se esconde un deseo. Detrás del miedo al invierno se esconde el deseo de sol. Detrás del miedo a perder se esconde el deseo de ganar. Detrás del miedo al cáncer se esconde el deseo de vivir.

Es precisamente ese punto el que enfatiza el Ayurveda. Solo la vida puede nutrir la vida. El Ayurveda propone múltiples respuestas y estrategias para ayudar a las personas a afrontar la plaga de nuestro siglo, ya sea de forma independiente o en paralelo con protocolos alopáticos.

Ya es hora de que unamos dos enfoques con métodos divergentes.

Ya es hora de que las personas tomen el control del cáncer tomando control de su vida a través de la comprensión y tomando decisiones inteligentes.